Econ. Alberto Azáldegui Gómez
Oficina de estudios económicos y financieros
Los precios en un mercado libre se forman en función a la oferta y la demanda; la demanda representa a los compradores y consumidores, mientras que la oferta representa a los productores y los empresarios que ofrecen bienes y servicios a favor de satisfacer nuestras necesidades y deseos.
Cuando existe mucha oferta de un determinado bien, es decir cuando la oferta supera a la demanda (existen más productos en el mercado de lo que los consumidores están dispuestos a comprar) los precios bajan. Normalmente los productores bajan el precio para poder vender sus productos hasta alcanzar el precio de equilibrio.
Cuando existe mucha demanda de un determinado bien, es decir cuando la demanda supera la oferta (existen menos productos de lo que los consumidores están dispuestos a comprar) existe una situación de escasez y los precios suben. Esta situación se da por que los consumidores impulsan al alza el precio para adquirir el bien escaso hasta alcanzar el precio de equilibrio.
La variable que sirve como mecanismo de trasmisión para definir qué y cuanto compramos y que vendemos es el precio. Esta variable nos indica qué comprar cuando los precios caen o qué producir cuando los precios suben. Precios más altos generan incentivos para los productores, y provocan precios más bajos para los consumidores. De la interacción entre compradores y vendedores es que se forman los precios de mercados de los bienes y se alcanza el equilibrio microeconómico. Esto en una economía de mercado sana y competitiva.
Cuando un gobierno pretende controlar precios, es decir fijar precios, lo que está haciendo es intervenir en las decisiones de millones de consumidores y cientos de productores generando distorsiones en la economía. Al imponer un precio máximo por decreto, precio controlado por debajo del precio de mercado, lo que va originar es lo siguiente: ante un menor precio, la cantidad demanda aumentará, es decir, habrá más consumidores dispuestos a comprar el determinado bien. Pero al mismo tiempo, habrá mas productores que dejarán de producir porque el nuevo precio no compensa su costo de oportunidad originándose una situación en la que existen mas compradores, pero a la vez menos productos en el mercado, es decir una situación de escasez.
Ante esta situación de escasez tendremos un escenario donde los productos tienen precios mas bajos que pocos producen, y a la vez mucha gente dispuesta a comprar, por eso mismo se van a originar colas en los establecimientos comerciales para poder adquirir los pocos bienes con precios controlados. Sin embargo, la necesidad existe, por lo tanto, los consumidores tendrán que dirigirse a los mercados negros y especulativos para poder comprar, pero a precios más elevados. Se generan más presiones inflacionarias.
En resumen, los controles de precios generan escasez, mercados negros y especulación, rompen el equilibrio microeconómico y distorsionan los mercados, como ocurrió en Perú entre los años 87- 90 y como actualmente ocurre en Venezuela y Argentina. Es decir, termina perjudicando a quienes en teoría se quería beneficiar volviendo más pobres a los pobres y desapareciendo a la clase media.
No repitamos experiencias nefastas que nos empobrecieron en el pasado y nos costó muchos años recuperarnos.